Isabel Pantoja lleva como mejor puede los desencuentros con su hija Isabel. El embarazo de la adolescente la pilló por sorpresa, como a toda la familia, pero no tuvo más remedio que asumirlo. La llegada del segundo nieto le alegró la vida, aunque esta felicidad resultó estacional. De nuevo, sus más y sus menos con una hija que lo que quiere es ser independiente, eso sí, sin tener base económica ni laboral para serlo. Tampoco el padre de la criatura, Alberto Isla, aporta estabilidad. Isabel Pantoja, poco dada a explayarse y mostrar sus debilidades, lo hizo con Vanitatis tras su espectacular concierto en el casino de Aranjuez. Quiso dejar claro que no está enfadada con su hija, sino dolida, que se muere de pena al ver su habitación vacía y que su hijo Kiko sigue siendo su gran apoyo. “Me llama todos los días y me dice que me quiere.Isabel no lo ha hecho nunca”.
Chabelita y alberto isla salen de la clinica con su bebeChabelita y alberto isla salen de la clinica con su bebe
Pregunta: ¿Hace cuánto tiempo que no ve a su hija?
Respuesta: Mucho, demasiado y no lo entiendo.
P: ¿Cómo se ha llegado a este punto?
R: Creo que la he protegido en exceso y este es el resultado de esa educación. La he dado todo lo que quería. Que quería piano, pues clases de piano, que quería aprender saxo, pues también. Estudió en un colegio inglés y me decía que su ilusión era marcharse a Cambridge. Si lo hubiera hecho ahora tendría su porvenir. Para eso la eduqué, no para tirarlo todo por la borda.
P: ¿Y ahora qué?
R: Pues eso ¿ahora qué? Dígamelo usted. Mi hija es muy inteligente, una excelente estudiante que sacaba notas espléndidas. Ella es bilingüe y podía haber hecho lo que quisiera. Sabe inglés mejor que español. No tengo ni idea de lo que quiere hacer. No me gusta que se haya metido en el mundo del corazón.
P: Pero usted también da exclusivas…
R: No quiero que sufra, que la hagan daño. ¡Solo tiene 18 años! Yo empecé a trabajar a los 13 para sacar a mi familia adelante. No pisé una discoteca hasta muy mayor y mi hija ha tomado un camino que no me parece el mejor. Tendría que prepararse, terminar sus estudios. Yo nunca fui una niña rebelde, siempre escuché a mis padres y los respeté. A mi madre, que ya es muy mayor, la sigo haciendo caso.
P: ¿Dónde está su hija ahora?
R: No lo sé. Me imagino que en Sanlúcar, pero no debería olvidar que ella es una Pantoja.
P: ¿Y el nieto?
R: Hace un tiempo que no lo veo. Quiero dejar claro que nunca he cerrado las puertas a la familia de Alberto. Han estado en Cantora cuatro veces y siempre les he recibido con los brazos abierto. Esto no es una cárcel. Mi hija ha entrado y salido cuando la ha venido en gana.
Isabel pantoja junto a su hija chabelita en un homenaje a la tonadillera en sevillaIsabel pantoja junto a su hija chabelita en un homenaje a la tonadillera en sevilla
P: ¿Qué le parece las intervenciones de su hija en televisión?
R: No veo la televisión, aunque si lo hacen mis abogados. Y mi madre como le gustan las series mira el canal nova.
P: ¿Cómo se encuentra anímicamente?
R: Estoy muy triste, muy abatida. Ver su habitación vacía me revuelve todo.
P: Le noto muy dolida…
R: Mis hijos son mi vida. Kiko fue el resultado del amor de dos personas y mi hija el de una sola, que soy yo, unido a la bondad de mi hijo.
P: ¿Qué dice su hijo Kiko?
R: Él es un apoyo grandísimo. Me llama todos los días y me dice que me quiere. Isabel no lo ha hecho nunca. Kiko sabía que no estaba bien, nada más llegar a la estación de Atocha cogió un taxi y se presentó en Aranjuez.
P: ¿Va a seguir viviendo en Cantora?
R: No, después de verano volveré a Madrid a mi casa de La Moraleja.