Ana Boyer y Fernando Verdasco continúan celebrando su amor. Después de que a principios del mes de septiembre saltara la noticia de su relación, la hija de Isabel Preysler no ha dudado en acompañar al tenista allá donde sus compromisos profesionales le han llevado viajando hasta Estocolmo y Londres, donde el tenista ganó la Copa de Maestros de dobles, triunfo que dedicó a la joven.
Tras celebrar el 30 cumpleaños del tenista junto a su familia, ambos han hecho hueco en sus agendas para disfrutar en solitario de una etapa en la que ambos parecen ilusionados. Este miércoles la revista ¡Hola! publicaba en exclusiva unas fotografías de la pareja en el Caribe en las que Ana y Fernando se dan un baño en la playa. Vanitatis ha podido confirmar cuál ha sido su itinerario así como dónde se han alojado. Tras desembolsar unos 2.500 euros por cada billete de avión en clase business, ambos pusieron rumbo a México D.F. a mediados de la semana pasada. Durante dos días, permanecieron en la capital realizando algunas compras para trasladarse a su destino final: la Riviera Maya.
Durante cinco días, la pareja se ha alojado en una de las siete villas del hotelBanyan Tree Mayakoba, uno de los más exclusivos de la zona de Playa del Carmen. De cinco estrellas, este resort ofrece unos alojamientos independientes con su propio jardín y acceso privado a una pequeña cala.La zona, considerada una de las más espectaculares de la Riviera Maya, tiene un ecosistema único de dunas, manglares y lagunas de agua dulce. Sin embargo, Fernando Verdasco y Ana Boyer decidieron no hacer turismo, ya que permanecieron en todo momento en el interior de la villa. Tampoco se acercaron a Playa del Carmen, la principal de la Península del Yucatán, por miedo a ser vistos o fotografiados por turistas, muchos de ellos españoles.
No fue un posado ‘pactado’
Con una distribución espaciosa y todo tipo de lujos, desde un vestidor, piscina climatizada y duchas al aire libre, hasta soportes de diseño para dispositivo de la marca Apple, la villa en la que se han alojado el tenista y Ana Boyer no es accesible para muchos bolsillos. Desde 310 a 550 euros diarios, cualquiera puede disfrutar de tres de las siete villas dedicadas, en exclusiva, para parejas. En el precio se incluye no sólo la estancia, sino también un desayuno tipo buffet en el propio alojamiento, un masaje corporal de 60 minutos y unasesión de relajación de 30 minutos en el Spa del hotel, todo ello con reminiscencias de la tradición asiática.
Sin embargo, y a pesar de que la privacidad es lo que ambos han buscado con este viaje, finalmente su romance ha vuelto a ser protagonista de una portada. Aunque las fotografías que publica la revista de cabecera de la familia Preysler parecen un posado pactado de la pareja, lo cierto es que se trata de un robado con teleobjetivo de un paparazzi que les ha seguido la pista durante una semana en la que Ana Boyer y Fernando Verdasco han desembolsado cerca de 7.000 euros.