LA TONADILLERA LLEGA A LOS 58
Fiesta en la finca Cantora desde el viernes hasta el domingo. Isabel Pantoja quiere celebrar por todo lo alto sus 58 años. Un aniversario muy diferente a los anteriores, en los que había problemas personales y legales sin solucionar. El más importante en aquel momento era la angustia de un posible ingreso en prisión por el recurso del fiscal, que pedía más años para ella; a lo que se sumaba el embarazo de una Chabelita menor de edad o los desencuentros de su otro hijo Kiko con Jessica Bueno, la madre del nieto. Problemas que, a día de hoy, el tiempo ha resuelto o Pantoja ha sabido administrar, como ha hecho cediendo con Chabelita para que volviera a casa como hija pródiga.
Este 3 de agosto la situación es muy diferente y por eso la fiesta ya está en marcha. Kiko no ha querido trabajar este fin de semana para animar Cantora. Chabelita y su hijo Alberto también están ya en casa junto a la matriarca, Ana Pantoja, y el tío Agustín, que forman el clan principal, al que se suman sus amigos Cristina, Tere, Juan Antonio, Juanjo –el médico– y el matrimonio que estaba dispuesto a pagar la fianza cuando la encarcelaron.
Desde por la mañana Isabel Pantoja organiza la cocina y ella se encarga de hacer personalmente el gazpacho con los amigos, a los que convierte en pinches. 50 litros que se guardan en uno de los frigoríficos y que se van sacando a lo largo de los tres días. "Y si hace falta hacer más, se hace, porque Isabel no quiere que nadie pase hambre en su casa", cuentan desde su entorno.
Cantora, lugar en el que se celebrará el cumpleaños de Isabel (Gtres)
El menú varía muy poco. Barbacoa en la piscina, paellas, embutidos de primera calidad, gambas, gambones, empanadas, ensaladas, torrezno... De los dulces y la tarta de cumpleaños se encarga una admiradora de Jerez propietaria de una pastelería, que obsequia de esta manera a su ídolo. Otros amigos ponen la bebida, el jamón pata negra y hasta contratan a los flamencos que actúan los dos días como música de fondo. Los amigos artistas como Las Mellis o Falete también cantan.
Son sus regalos. Al resto de los invitados se le puede olvidar el obsequio, que puede ir desde el bolso de Loewe de 1.000 euros o el Gucci de 3.000, a perfumes (Chanel Nº5 es su preferido), pañuelos de marca, relojes, ropa de lujo y hasta lavadoras, secadoras o aparatos de cocina, que se encarga de comprar sus club de fans. Este año acude una representación de 60 seguidoras de los distintos clubs que hay de Pantoja en España y que han pagado 250 euros por persona. Ese dinero les da derecho a participar en las fiestas de Cantora y sirve también para comprar un regalo conjunto. Una de las premisas para seguir formando parte del grupo de elegidos que comparten cumpleaños con la cantante es llevar un regalo de categoría. En caso contrario, no volverán a ser convocados. Cuentan que cuando Muñoz aún era novio, le envío al cumplir 56 años un ramo de flores por año con intervalos de horas. Un despropósito como otras muchas ostentaciones del hoy encarcelado exalcalde.
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