El solomillo de pavo es una opción sana y muy, muy tierna que puedes preparar a la plancha o al horno. Nosotros te sugerimos esta receta al horno, sobre una base de queso y mostaza, y acompañado de cebolla y zanahoria.
Ingredientes para 2 personas:
Solomillo de pavo (2 filetes gruesos)
1 cebolla
3 zanahorias
Queso de untar
3 cuacharadas de mostaza antigua
Aceite de oliva virgen y sal al gusto
Pimienta molida, perejil y ajo molido
Elaboración:
Pon el horno a precalentar.
Pela y trocea la zanahoria, y haz lo mismo con la cebolla.
Mezcla en un recipiente el queso de untar con la mostaza antigua, remueve bien y echa un chorro de aceite de oliva. Reserva a un lado.
Haz cortes en el solomillo para que se haga bien por dentro y espolorea por encima un poco de pimienta molida, ajo molido y sal.
Coloca el solomillo en la bandeja del horno (puedes cubrirla con papel albal para que no se te pegue) y, encima, añade la zanahoria y la cebolla troceadas.
Espolvera perejil y una pizca de sal por encima de la zanahoria y la cebolla, y echa un chorro de aceite por toda la bandeja.
Cuando el solomillo esté hecho, sácalo del horno y colócalo rápidamente sobre la crema de queso y mostaza, así se deshará debajo del solomillo.
A un lado, pon la zanahoria y la cebolla, y ya tienes listo tu plato.
La palabra "terapia" puede estar cargada de implicaciones. Como consecuencia del desconocimiento sobre la salud mental y su tratamiento (que ayuda a millones de personas), las palabras "terapia" o "psicólogo" se juzgan y estigmatizan, cosa que se interpone en el camino a la curación.
No hay ninguna diferencia entre acudir a un profesional de la salud mental e ir al médico cuando se tiene cualquier otra enfermedad. Existen investigaciones que demuestran que ir al psicólogo es una de las mejores maneras de tratar los trastornos relacionados con la salud mental. Es una manera muy recomendable de pasar por los momentos difíciles o de presión que pueden estar causando estrés.
Los psicólogos pueden proporcionar a sus pacientes las herramientas necesarias para sobrellevar su condición. Es perfectamente razonable ir al médico por una enfermedad física. ¿No debería pasar exactamente lo mismo al acudir a un especialista por un problema de salud mental?
Lo importante, después de todo, es estar sano. Y estar sano incluye cuidar la mente. Con el objetivo de desmitificar el proceso de ir al psicólogo, aquí tienes una lista con nueve cosas que todo el mundo debería saber sobre la terapia.
1. No hay que avergonzarse de ir al psicólogo
Todo el mundo experimenta episodios de estrés o de tristeza. Pero cuando esos sentimientos se convierten en algo demasiado abrumador los psicólogos pueden ser de gran ayuda para recuperar el control. No hay nada humillante en buscar ayuda.
"Hablar de tus problemas con alguien puede ser muy útil. Aporta otras perspectivas", explicó al HuffPost Gregory Dalack, jefe del departamento de psiquiatría de la Universidad de Michigan.
"Y hablar con alguien que está preparado para comprender la ansiedad y la depresión puede ser más útil aún para ayudarnos a gestionar esos síntomas, a delimitar los pensamientos negativos que tendemos a tener y a trasladarnos [mentalmente] a un lugar en el que podamos lidiar con estas dificultades", afirmó.
Incluso la gente que aparentemente tiene una vida bien amueblada a veces necesita un poco de ayuda. Varias personalidades famosas, desde Kerry Washington y Howie Mandel hasta Kate Middleton pasando por Demi Lovato han ensalzado los beneficios de ir al psicólogo.
2. El estigma sigue estando presente
Aparte de que a veces se tiene una percepción negativa de la terapia, el estereotipo hace que mucha gente ni siquiera la considere como opción. De hecho, muchas personas que sufren depresión no buscan tratamiento para su condición de manera activa.
Volvamos al primer punto: no hay nada malo en pedir ayuda.
3. Todos somos diferentes
No hay una solución universal que valga para tratar todos los problemas de salud mental. Hay muchos métodos, desde la terapia de grupo hasta la terapia cognitivo conductual. Que una cosa le funcione muy bien a una persona no significa que le vaya a venir igual de bien a otra.
En Japón se tiene la creencia de que el tipo de sangre revela la personalidad y la compatibilidad de cada uno. En Japón se le dice "ketsu eki gata" y es un factor popular e importante para determinar el temperamento de las personas. Es una especie de signo del zodiaco con algunas diferencias. Si bien para nuestra cultura pude parecer absurdo, para los japoneses es algo serio, incluso suelen hacer citas dependindo del tipo de sangre que uno tenga. Esta obsesión comenzó en 1972, cuando un profesor de psicología llamado Furukawa Takeji empezó a observar las personalidades y temperamentos de sus estudiantes. Como resultado de esta observación llego a la conclusión de que las personas con el tipo de sangre A eran más intelectuales, las del tipo B más rebeldes y temperamentales. A partir de esto se le ha ido dando cada vez más importancia a este factor biológico para revelar la personalidad, el futuro y compatibilidad de cada persona.
Tipo de sangre A: El granjero
Se cree que las personas con tipo de sangre A son tranquilas, serias y con un buen temperamento. Tienen un carácter firme, son confiables y a veces tienen cabeza dura. Son tímidas, introvertidas y todas unas perfeccionistas. Además son consideradas por los demás como personas que mienten constantemente y le son leales a sus amigos y compañeros de trabajo.
Saben guardar secretos y no expresan sus sentimientos constantemente. Intentan suprimir sus emociones por lo que parecen ser personas fuertes pero en realidad son frágiles y nerviosas. Tienden a ser muy duras con quienes no comparten la misma naturaleza fuerte y en consecuencia se rodean de otros con el mismo temperamento. Se emborrachan fácilmente y son súper artísticas. También toman muchas precauciones y son algo sensibles. Llegan a ser arrogantes y rebeldes cuando toman de más.
Tipo de sangre B: El cazador
Quienes tienen tipo de sangre B suelen ser personas curiosas. Serán buenas pero también se interesan de más por los intereses y hobbies de los demás. Se emocionan fácilmente pero pierden el interés rápidamente. Saben identificar sus prioridades y se involucran tanto en su mundo que olvidan que hay otras personas rodeándolas. Tienen espíritus independientes y personalidades fuertes.
Dan la imagen de ser alegres, llenos de energía y entusiasmo, pero muchas suelen ser lo contrario por dentro. No les gusta el contacto con otros y les importa muy poco lo que piensen los demás de ellas. Son extremadamente apasionadas con respecto a las personas y cosas que realmente les importa.
En general son curiosas, entusiastas, independientes, sensibles e impredecibles pero al mismo tiempo pueden ser superficiales, poco confiables, egoístas, indiscretas, flojas e impacientes.
Tipo de sangre AB: El humanitario
Son personas impredescibles, distantes y tienden a tener la cabeza en el corazón. Pero son muy buenas para ganar y manejar dinero. Por tener la combinación de dos tipos de sangre, tienen una personalidad mezclada: una para las personas externas y otra para las cercanas. Son consideradas y toman en cuenta los sentimientos de los demás. Pero también son estrictas consigo mismas y con sus seres queridos.
Tienden a ser sentimentales y reflexionar profundamente sobre sus problemas. Suelen tener muchos amigos, pero al mismo tiempo necesitan tiempo para estar solas y pensar. Pueden ser muy extrovertidas pero tímidas al mismo tiempo. Son responsables pero a veces eso les causa muchos problemas. Tambien son confiables y les gusta ayudar a otros.
En general son sensibles, consideradas, precavidas y eficientes pero también estrictas, temperamentales, criticonas y se ofenden fácilmente.
Tipo de sangre O: El guerrero
Las personas con tipo de sangre O son extrovertidas, expresivas y apasionadas. También se motivan fácilmente y son líderes natas. Han sido bendecidas con una presencia fuerte y no les da miedo apostar ya que saben que ganarán (ósea que también son arrogantes). Dado que tienen la esencia de líder crean armonía en su grupo y sus amigos. Su imagen transmite paz y entusiasmo, incluso a veces las ven como personas con un gran corazón y benevolentes que gastan más por generosidad.
Son atletas naturales y buscan el triunfo de forma obseviva. Son sociables, perseverantes y confiables pero a veces no toleran ni aceptan sus errores. Creativas y populares, estas personas aman ser el centro de atención y dan la ilusión de tener mucha confianza en sí mismas.
En general son entusiastas, generosas, independientes, flexibles, idealistas, atléticas, competitivas y adaptables. Pero a veces son despistadas, celosas, egoístas, poco confiables y tienen una boca muy grande.
Cada día, todos los días, un nuevo paso hacia la salud.
Confirmado:
A medida que envejecemos vamos perdiendo cada vez más la capacidad de generar un sueño profundo y reparador. Esta es la conclusión a la que ha llegado el Laboratorio de Sueño y Neuroimagen de la Universidad de Berkeley en California, Estados Unidos, tras llevar a cabo una revisión de la literatura científica existente sobre la calidad del sueño.
Hasta ahora muchos estudios señalaban que si un adulto dormía menos se debía a cambios en su horario o simplemente a que necesitaba dormir menos. Pero los últimos resultados, publicados en la revista Neuron, afirman que en realidad ocurre al revés y que los adultos no es que tengan menores necesidades de sueño, sino una menor capacidad de generar ese sueño.
Esto ocurre porque a medida que el cerebro envejece se van degradando las neuronas responsables de regular el sueño y, en consecuencia, cada vez se produce una menor cantidad de sueño no REM (Rapid Eye Movement o fase de movimientos oculares rápidos), que corresponde a la etapa más profunda del sueño y desempeña un papel clave a la hora de conservar la memoria.
La menor capacidad de generar sueño comienza a partir de los 35 años y suele afectar más a los hombres que a las mujeres. Además, un mayor deterioro del sueño puede influir en el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas como el alzhéimer y la demencia.
Todo empezó con Laxatón, una cantata elaborada sobre el prospecto de un laxante. 50 años después, ese grupito de amigos que es Les Luthiers les han ganado el premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades a “algunos monstruitos como Martin Scorsese” dice Marcos Mundstock, tras saber, casi en la madrugada de Buenos Aires, que recibirán el galardón, para el que habían sido nominados varias veces, de entre 28 candidatos como el cineasta. El grupo lleva 50 años en los escenarios. “Quedamos nosotros y los Rolling Stones. Pero nosotros lo hicimos sin agregados químicos”, se ríen en las entrevistas, un lujo para cualquier periodista. Porque Les Luthiers no solo hacen reír a los demás. Ellos mismos se hacen mucha gracia. Viven creando chistes, que prueban después con el público y si no funcionan retiran rápidamente hasta perfeccionar un espectáculo que es una carcajada continua. Ventajas de llevar 50 años puliéndolo en el escenario. Se cumplen precisamente este 4 de septiembre. Y no paran.
Ahora mismo tienen una gira en Rosario con su show Gran Reserva, una antología. La semana que viene lo llevarán a Buenos Aires. Después, en septiembre, volverán de gira a España, como todos los años. “En realidad, la gente no se acuerda de los chistes viejos, se ríe de nuevo cada vez”, se sorprende Jorge Maronna, otro de los cinco fundadores. “A veces nosotros tampoco nos acordamos, tenemos una edad”, bromea. “Estamos felices con el premio, aturdidos. Nos llega en un momento ideal del grupo, estamos con muchas ganas y mucho público. Desde hace unos años hay muchos jóvenes en la platea, se ha renovado. Lo peor es que no esté Daniel con nosotros para celebrarlo”, dice mientras cambia el tono de voz.
Daniel es Rabinovich, Neneco, fallecido en 2015. Un golpe duro que el grupo consiguió superar. Él mismo les pidió que siguieran tras su muerte y lo han cumplido. Juntos después de 50 años. “Hicimos 17 años de terapia, bien argentinos, porque no nos queríamos separar. Todos los grupos rompen, nosotros logramos seguir. El psicoanálisis nos ayudó mucho. Ahora cumplimos las bodas de oro. Si llegamos a los 100 como sería, ¿bodas de plutonio radiactivo?", bromea Carlos Núñez Cortés.
“UN REFERENTE DE LIBERTAD”
El jurado del premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades destacó ayer que Les Luthiers “es uno de los principales comunicadores de la cultura iberoamericana desde la creación artística y el humor”. Según recordó el presidente del jurado, Víctor García de la Concha, el grupo ha atraído a “cientos de miles de espectadores de todas las generaciones”, en España, Latinoamérica e incluso Estados Unidos e Israel, y con sus actuaciones se ha erigido en “un espejo crítico y en un referente de libertad en la sociedad contemporánea”.
Cuando empezaron, en 1965, con la cantata Laxatón, eran un grupo de estudiantes de medicina, química, derecho, ingeniería, que se divertían en un coro universitario. Ninguno podía imaginar que vivirían toda la vida de eso y serían estrellas mundiales. Ya entonces tocaban el Laxatón con instrumentos inventados por ellos. Pero no era más que una broma para divertir al público de un concurso de coros. Gustó tanto que empezaron a llevarla por los teatros. Y ya nunca pararon, ni siquiera cuando sufrieron la muerte de Gerardo Masana, el primer líder.
Todos hablan ahora de una trayectoria en pleno apogeo. "Yo tengo 70 años y me siento muy joven, esto no es un premio a unos viejos que terminaron su carrera, es un espaldarazo para seguir. No somos ancianitos viviendo del recuerdo", cuenta Carlos López Puccio, el de los pelos blancos alocados. "Todo esto empezó casualmente, nunca pensamos que llegaríamos a tanto. Siempre crecimos más de lo que habríamos esperado. En el premio hay un reconocimiento a 50 años de carrera pero también al puente que tendemos en Hispanoamérica a través del español, lo usamos y le ponemos ingenio. También es un premio al humor aunque nosotros somos un híbrido, hacemos humor, música, teatro, mimo. Lo que me da un poco de vergüenza es haberle ganado a Scorsese. Yo si hubiera sido jurado le votaba a él", remata.
También tiene un recuerdo para Rabinovich. "Llevamos muchos años nominados, y Neneco tenía muchísimas ganas de que nos lo dieran. Es doloroso que no esté, se lo merecía. Pero estamos muy contentos. Ahora voy a pasearme por las calles con la frente bien alta diciendo yo recibí el Príncipe de Asturias y sigo trabajando. Todos tenemos nuestros ahorros, podríamos retirarnos, pero nos hace felices estar en el escenario. Damos alegría noble por un módico precio".
Todos están muy impactados por el premio. "Esto es una vez en la vida, y este tardó mucho, 50 años, ahora podemos confesar que lo soñábamos. Sobre todo viniendo de España. Hace 50 años todos estudiábamos, teníamos proyectos. Les Luthiers fue desplazando todos los otros sueños y planes. Es nuestra vida. Estamos muy orgullosos, me parece maravilloso eleva al humor a esta categoría. Es un nutriente, algo necesario. Los humanos somos monos que ríen. Tenemos un premio que le dieron a Woody Allen y en Argentina a Quino, a Alfonsín, a Baremboin", se emociona Carlos Núñez Cortés. Todos reivindican que hacen humor "con altura", elegante, inteligente, nunca zafio, con el añadido de la música que tanto cuidan.
Les Luthiers ya son universales, pero no pueden ser más argentinos, un país que, como todos, aman y sufren. "Argentina es muy contradictoria. Nosotros hemos sido embajadores de la parte buena, que además de las catástrofes que todos conocen tiene estas puntas", dice López Puccio. "Representamos una Argentina que es la de nuestros comienzos, en los 60, cuando era un país un poco más normal, con una universidad muy sólida en la que nos conocimos. Todo empezó literalmente como una broma. Solo queríamos divertir a los otros estudiantes. No parecía tener mucho futuro. Pero aquí estamos. Seguimos igual. No queremos cambiar el mundo, solo que la gente se divierta", concluye Maronna. 50 años después, los teatros están más llenos que nunca con las nuevas generaciones que no quieren perderse a Les Luthiers.