VISITARON LA PARROQUIA DE CORRAL DE ALMAGUER
Este miércoles Jesús Serrano, el párroco de Corral de Almaguer (Toledo), desayunaba con la noticia de que Sara Carbonero e Iker Casillas habían estado en su parroquia, Nuestra Señora de la Asunción, para comentarle sus planes de pasar por el altar. Nada más lejos de la realidad. Según ha relatado don Jesús a Vanitatis, no él es el que aparece en las fotos de las revistas. "Ni siquiera tengo el gusto de conocerlos", ha dicho el sacerdote en conversación telefónica con este portal.
Al parecer, sí visitaron la parroquia para ver a la Virgen, pero no charlaron allí con ningún párroco. Iker y Sara mientras paseaban por el pueblo de la periodista coincidieron con otro cura, amigo de Sara, y quisieron fotografiarse con él, pero éste ni da misa en Corral de Almaguer ni resulta conocido para don Jesús, que le ha visto por primera vez a través de las fotos que publican algunas revistas y que le han fotocopiado algunos feligreses.
No es la primera vez que se desploman como un castillo de naipes los rumores sobre una inminente boda entre Iker y Sara. En marzo de 2012, una conocida revista anunció que la manchega y el madridista iban a contraer matrimonio en julio de ese mismo año, una vez finalizase la Eurocopa, y apenas unos meses después otro diario se atrevió incluso a dar la lista de invitados.
El tiempo evidenció que aquellas informaciones no eran ciertas, pero apenas un año después unas declaraciones ambiguas de Goyi Arévalo, madre de Sara, volvieron a avivar la llama. “No puedo decir nada de este tema”, dijo Goyi a la prensa ante las preguntas sobre una posible boda. Unas palabras que parecían dejar ver que la madre de la periodista había sido presionada para guardar el secreto de la que, de producirse, habría sido la boda del año.
Sin embargo, un año después y con Martín como epicentro de su consolidada relación, el sí, quiero sigue sin llevarse a cabo. Los empeños en ver a Sara Carbonero vestida de blanco no cesan, pero, de momento, ninguno de sus protagonistas se pronuncia al respecto y prefieren centrarse en el pequeño Martín.