Muchas personas confunden la práctica de la Ley de Atracción con tener simples fantasías. Pero, definitivamente, son dos cosas bien distintas.
La imagen es de Chris Danger
Por tener fantasías, o “soñar despierto”, me refiero a imaginar situaciones agradables de cualquier tipo, durante un tiempo más o menos prolongado, sin tener verdaderas intenciones de hacerlas realidad (muchas veces porque sería literalmente imposible).
Las fantasías son como películas que proyectamos en nuestra mente y sus contenidos admiten infinitas variantes, de acuerdo a qué tipo de situaciones nos generen placer.
“La vida secreta de Walter Mitti” es una excelente película que acabo de ver. Su protagonista tiene el hábito de soñar despierto… hasta que decide darle a su vida un giro realmente audaz. Y desde ese momento la realidad pasa a ser mucho más interesante para él que cualquiera de sus fantasías: