La terapia de andulación es un método de tratamiento basado en principios biofísicos y cuyo objetivo es aliviar el dolor y aumentar el bienestar físico y la energía. La Andulación combina vibraciones mecánicas y calor infrarrojo en profundidad, actuando en todo el organismo para obtener un impacto positivo en sus funciones esenciales. Existendiferentes productos para beneficiarte de la Andulación en casa o en la consulta de un profesional médico, pero en cualquier caso con la supervisión de éste. Pero ¿cómo actúa la Andulación?
Funcionamiento de la Andulación
Producción de energía celular: la Andulación favorece la producción de Trifosfato de Adenosina (ATP), molécula encargada de proveer energía a las células.
Alivio del dolor: actúa de dos formas. Las vibraciones mecánicas crean señales positivas en el cuerpo que se van superponiendo al dolor, de tal manera que se consigue aliviarlo en gran medida. Por otro lado se liberan endorfinas, el analgésico natural de nuestro cuerpo.
Activación del riego sanguíneo: muchas dolencias son debidas a una mala circulación de la sangre. La sangre es la encargada de llevar los nutrientes a todo nuestro organismo. Gracias a la Andulación se favorece el riego sanguíneo y se dota de más nutrientes a todo el cuerpo.
Relajación y sistema nervioso: se consigue tanto relajación física (disminución de la tensión muscular) como mental (reducción del estrés).
Estimulación del sistema linfático: la linfa es un fluido acuoso cuya misión es desintoxicar el organismo. La Andulación activa el flujo linfático, fortaleciendo el sistema inmune.
Aplicaciones de la Andulación
¿Para qué es adecuada la Andulación? En general para todo lo que tenga que ver con el dolor y con aumentar la energía y el rendimiento físico.
Dolor crónico debido a diferentes patologías como el dolor de espalda, fibromialgia, artrosis, artritis, hernia discal o lumbalgia. También es adecuada para el dolor agudo producido por un esfuerzo físico, o incluso para prevenir dolores futuros.
Es adecuado para aumentar el rendimiento físico. Numerosos deportistas lo están incluyendo en sus rutinas de calentamiento antes de comenzar los entrenos o una competición. Y también es usado para regenerar el organismo tras el esfuerzo físico.
La Andulación también está indicada para tratamientos wellness y de bienestar, gracias a sus efectos antiestrés, relajantes y de activación del drenaje linfático.
Un grupo de expertos afirman haber resuelto el misterio del Triángulo de las Bermudas, con el descubrimiento de nubes extrañas en forma hexagonal que cubre la región.
Crédito: LiveScience
Según un documental del canal Science, estas nubes hexagonales están creando vientos de 106 kilómetros por hora (65 mph) que actúan como
«bombas de aire» para hundir barcos y derribar aviones.
El nombre de Triángulo de las Bermudas se refiere a una región del océano rodeado por Florida, Bermudas y Puerto Rico, y denominado
de esa manera en la década de 1950 por un periodista llamado Edward Van Winkle Jones, quien escribió una historia para la Associated Press
sobre un gran número de barcos y aviones que desaparecieron en la región.
La idea realmente despegó en la década de 1970, cuando Charles Berlitz publicó el best seller «The Bermuda Triangle», y todo el mundo empezó
a hablar sobre Ovnis y las desapariciones que frecuentaban la región.
Los investigadores ahora analizan las imágenes desde un satélite de la NASA y las nubes en forma hexagonal que oscilan entre los 88
y 32 kilómetros (20 a 54 millas) de ancho, aproximadamente unos 240 kilómetros (149 millas) fuera de la costa de Florida, sobre las Bahamas.
Steve Miller, un meteorólogo por satélite de la Universidad Estatal de Colorado, dijo al canal Science que su aspecto rectilíneo es bastante inusual.
«Por lo general no se ven los bordes rectos en las nubes», dijo Miller. «La mayoría de las nubes son aleatorias en su distribución todo el tiempo».
Aunque esto no es un fenómeno aislado, pues, el equipo también examinó similares formas de nubes sobre el Mar del Norte de la costa del Reino
Unido, y encontraron asociaciones con el nivel del mar y los vientos de hasta 160 kilómetros por hora (99 millas por hora), que son lo suficientemente potentes como para crear olas de más de 14 metros (45 pies) de altura.
«Estas formas hexagonales sobre el océano son en esencia bombas de aire», dijo Randy Cerveny de la Universidad de Arizona al canal Science.
Evidencia de vientos hexagonales en la región. Crédito: Science Channel
«Están formadas por lo que se llama microrráfagas. Son ráfagas de aire que salen de la parte inferior de una nube y luego golpean el océano
para crear olas que a veces pueden ser enormes en tamaño y comienzan a interactuar entre si».
Este descubrimiento referido a las nubes aún no ha sido publicado en una revista científica, por lo que se se espera que pronto se pueda
De las olas aprendí a irme y regresar con más fuerza
Aprender a retirarse a tiempo cuando estamos ante una situación compleja, reflexionar, pensar en lo sucedido, comprender cómo nos sentimos y regresar para volver a intentarlo una vez que hayamos recuperado fuerzas, es un acto de valentía.
Elegir el momento adecuado para retirarse de una relación, de una discusión con otra persona o de un trabajo que no nos satisface requiere fuerza de voluntad y superar el miedo a las consecuencias. En ocasiones vivimos situaciones que nos desgastan y no somos capaces de salir para retomar fuerzas.
La búsqueda de la felicidad
Hay circunstancias en las que es preciso pensar en nuestra felicidad personal y caminar hacia nuestra paz interior para retomar fuerzas. Son situaciones en las que es esencial tender hacia una coherencia entre los que pensamos, sentimos, decimos y hacemos.
La felicidad es un término que parece utópico y lo solemos referir al pasado “en verano del año 2000 fui feliz”. Los investigadores sobre psicología positiva consensuaron una definición del concepto de felicidad en base a tres competentes:
Experiencias de afecto positivo frecuentes (alegría, placer, amor, cariño).
Experiencias de afecto negativo infrecuentes (tristeza, estrés, ansiedad, miedo, dolor).
Altos niveles de satisfacción vital.
Es decir, una persona feliz es aquella que vive muchas experiencias de afecto positivas, pocas negativas y que se siente satisfecha con su vida. No obstante, no podemos olvidar que no existe una felicidad objetiva sino un estado subjetivo de felicidad en cada uno de nosotros.
La búsqueda de ese estado subjetivo de felicidad es el que nos impulsa a irnos cuando notamos que una situación es incómoda o simplemente no nos hace felices, y a regresar una vez que hayamos recuperado nuestra energía vital.La inteligencia emocional y su valor para regresar con más fuerza
La felicidad del ser humano se relaciona directamente con determinadas emociones y estados de ánimo. Ahí es donde entra el juego la inteligencia emocional como la capacidad de comprender nuestras emociones y las de los demás.
En cuanto a las emociones, hay especialistas que piensan que podemos controlarlas totalmente y otros que opinan que no podemos hacer nada para tenerlas bajo control. Sin embargo, también hay investigaciones que concluyen que la forma en la que interpretas tus emociones puede cambiar la forma en la que las vives.
Por ejemplo, si te da miedo hablar en público pensarás que esos nervios son negativos, pero si los interpretas como una voluntad de hacerlo bien es más probable que tengas éxito. Se trata simplemente de comprender cómo nos sentimos y manejar esas emociones a nuestro favor.
No es una huida es una reflexión para poder volver
En muchas ocasiones, la soledad nos permite un tiempo de conocimiento sobre nosotros mismos, de reflexión sobre nuestra vida. La soledad nos da espacio y lugar para poder identificar nuestras fortalezas y debilidades y trabajar en lo que debemos mejorar.
Por ese motivo, no podemos ver la soledad como algo negativo, sino como una colaboradora del proceso de autoconocimiento necesario en diferentes momentos de nuestra existencia. A veces necesitamos recuperar fuerzas y energía, regresar a nuestro origen, y la paz de la soledad nos ayudará.
Cómo gestionar tus emociones para recuperar energía
El uso de la inteligencia emocional pasa por identificar nuestras emociones y estados de ánimo: reconocer cuándo estamos enfadados, nerviosos o tristes, para poder actuar sobre el origen de la emoción y en el último caso sobre la emoción misma. A continuación te damos algunas herramientas para gestionar emociones negativas.
Piensa en tus virtudes y no en tus debilidades
Si te paras un momento a pensar en todo lo que te dices cuando te ocurre algo negativo, te darás cuenta de que eres tú misma la que alimenta a esa emoción y hace que, poco a poco, se vaya haciendo más grande. Así, si al principio era fácil de manejar, cuando lo ha contaminado todo puede llegar a representar un gran reto.
Si cometes un error en el trabajo no es necesario que te tortures, sino que aprendas. Que no dejes crecer el desánimo, recordando todas las veces en que has hecho cosas bien. De esa formarelativizarás lo sucedido, gestionarás las emociones negativas y podrás regresar a tu paz interior.
Desvía tu atención hacia otra cosa
Al igual que sucede con los niños pequeños cuando lloran y tratamos de distraerles con un juguete, si nos comienza a invadir una emoción negativa, podemos concentrarnos en otra tarea para desviar nuestra atención y regresar a nuestra tranquilidad interior. El control de la atención juega un papel muy relevante para frenar ciclos emocionales negativos que se retroalimenten.
De esta forma te alejas de la emoción negativa y te concentras en otro objetivo hasta que transcurre un tiempo y esa emoción va desapareciendo poco a poco. Es una estrategia que se puede utilizar en algunas ocasiones, porque lo aconsejable es gestionar esa emoción y conocer su origen y causa.
Apuesta por la meditación
Diferentes estudios científicos han demostrado que la meditación ayuda a prevenir los pensamientos y las emociones negativas. Meditar puede ayudarnos a gestionar miedos y a reducir la ansiedad, puesto que se trabaja con la respiración y la concentración.
Busca un lugar tranquilo, respira de forma pausada, siente como entra y sale suavemente el aire de tus pulmones, mientras tu mente y los músculos tu cuerpo comienzan a relajarse cada vez más.Practica la meditación cada día y lograrás buenos resultados poco a poco.
Con el Alcázar de Segovia como punto de partida, la Ruta de los Castillos es un viaje no sólo a la provincia de Segovia sino a su patrimonio monumental en el que la Edad Media cobra protagonismo a través de recintos amurallados, torres, fosas o puentes levadizos. En el camino el viajero se encontrará los castillos de Castilnovo, Coca, Cuéllar, Pedraza y Turégano, unas fortalezas de varios siglos de vida en los que transportarse hasta el Medievo.
El Alcázar de Segovia, la primera parada, está construido sobre un cerro rocoso entre dos ríos, el Eresma y el Clamores y es uno de los palacio-castillo más llamativos de Europa gracias a su forma de proa de barco. Su emplazamiento ha estado habitado desde época romana y su construcción es hispano árabe. De hecho se tiene noticias de su construcción desde 1122 . Por él han pasado monarcas tan importantes como Alfonso X El Sabio o los Reyes Católicos y aún conserva el patio herreriano, el foso, el puente levadizo, la torre del homenaje, una capilla interior y varias dependencias nobles como la Sala del Trono o la de los Reyes.
Alcázar de Segovia. | Segovia Turismo
Una segunda parada y saliendo de Segovia es el Castillo de Turégano, de tiempos celtíberos. Este castillo aún conserva las torres del antiguo castrum romano y llama la atención porque la Iglesia de San Miguel está integrada en el castillo siendo una iglesia fortificada, cuya espadaña -campanario de una sola pared- data de 1703. Algunos de los ilustres personajes que pasaron habitaron en este castillo, concretamente en sus mazmorras fueron el hijo del Duque de Osuna, el Almirante de Aragón o el primer ministro de Felipe II, Antonio Pérez.
El Castillo de Pedraza es la tercera parada en la ruta y es uno de los castillos más antiguos de Europa con vestigios romanos, visigodos y árabes. Construido en el siglo XIII, fue modificado en los siglos XV y XVI, esta última vez por los Duques de Frías, quienes añadieron un gran muro defensivo a la torre del homenaje y un muro exterior donde instalaron cañorenas. En él estuvieron prisioneros los hijos de Francisco I de Francia y actualmente, una de las torres acoge el Museo Ignacio Zuloaga, quien compró el castillo a principios del siglo XX instalando aquí su taller.
Muy cerca se ubica el Castillo de Castilnovo, del siglo XIV y estilo mudéjar. Como el castillo anterior, perteneció a los Duques de Frías, aunque antes habitaron sus muros Don Álvaro de Luna y la familia Zúñiga. Lo cierto es que el origen de este castillo no está claro y hay quien lo atribuye a Abderramán I o a Almanzor, pero lo cierto es que los restos más antiguos que quedan en pie son del siglo XII y XIII.
Castillo de Cuellar. | Segovia Turismo
Continúa la ruta hacia el Castillo de Cuéllar o de los Duques de Alburquerque, muy bien conservado y un excelente ejemplo de fortaleza castellana. Construido en una amalgama de estilos, predomina en gótico y el renacentista. Y es que nació como edificación militar pero se transformó en un suntuoso palacio cuando pasó a ser propiedad de los Duques de Alburquerque. A lo largo de los siglos ha sido, además de fortaleza y palacio, una prisión y actualmente alberga un centro de enseñanza y el archivo de los Alburquerque.
El último de los castillos de esta ruta es el Castillo de Coca, del siglo XV y uno de los mejores ejemplos de fortificacion gótica-mudejar de España. De planta cuadrada y con un impresionante foso, está construido sobre una explanada en una zona escarpada y su alzado se atribuye a los alarifes sevillanos.
Y si al finalizar esta Ruta de los Castillos alguien se queda ganas de ver más, Segovia cuenta con otras referencias como los castillos de Ayllón, Fuentidueña, Maderuelo, Sepúlveda y Valdeprados, no siempre en tan buenas condiciones pero grandes ejemplos de fortificaciones medievales.
Os traigo una receta de gambones , que es diferente...si , normalmente los comemos a la plancha, al horno, cocidas ... hoy les vamos a dar un toque oriental...
Además de tener un aspecto estupendo y muy apetecible, es que su sabor es increíble y muy apropiadas para ponerlas en nuestras mesas de celebraciones.
Pueden ser un estupendo aperitivo, o entrante, aunque también pueden ser una cena ligera acompañadas de una rica ensalada y un buen pan, porque la salsa es deliciosa y no os váis a poder resistir a mojar en ella...
Ingredientes: - 1/2 kg de gambones - 2 dientes de ajo - 3 -4 cucharadas soperas de salsa de ostras - 3 cucharadas soperas de salsa de soja - 1/2 vasito de agua - 2 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen
Pelamos los gambones y reservamos las pieles y las cabezas.
En una sartén ponemos las cucharadas de aceite y salteamos las cabezas y las pieles, las aplastamos bien para que suelten el jugo... las sacamos procurando que quede todo el jugo en la sartén.
En ese mismo jugo echamos los ajos picados y los doramos. Añadimos la salsa de ostras y la salsa de soja y el agua.
Lo dejamos hervir hasta que reduzca a la mitad y añadimos los gambones y los dejamos hacer 2 minutos.