Roma es también llamada la “Ciudad Eterna”. Es la capital de Italia y un lugar tan hermoso que, una vez que la visitas, no la olvidas jamás.
Estos son algunos de los lugares imprescindibles de Roma, que de seguro vas a querer grabar en tu memoria si algún día visitas esta linda ciudad.
El Coliseo romano
Ver el Coliseo de Roma por primera vez, es algo que emociona a cualquiera, no importa cuántas fotos hayas visto antes.
El Coliseo es un impresionante anfiteatro que se ha convertido en un símbolo del poder romano durante unos 2000 años, refleja el temor que algún día Roma llegó a inspirar.
Lo cierto es que este hermoso lugar ha sido restaurado recientemente, por lo que luce una apariencia de lo más espléndida.
Caminar de forma ascendiente por sus gradas empinadas es una experiencia que no olvidarás. Tu mente viajará al pasado y te imaginarás el anfiteatro repleto de espectadores furiosos que gritan pidiendo sangre. Esta imagen escalofriante te erizará la piel.
El Museo e Galleria Borghese
Aunque Miguel Ángel y la Capilla Sixtina son las obras de arte más conocidas de Roma, la verdad es que la ciudad italiana presenta tanto arte barroco como renacentista y, El Museo e Galleria Borghese es un lugar ideal para admirarlo.
Si estás en Roma y deseas visitar El Museo e Galleria Borghese, debes hacer reservación pero, en serio, vale la pena. En él podrás admirar obras de arte como: las espectaculares esculturas de Bernini, obras de los artistas Canova, Caravaggio, Rafael y Tiziano. Además, el museo está rodeado por un parque llamado Villa Borghese, ideal para asimilar lo que acabas de ver dentro de las instalaciones.
Panteón
Es el monumento romano antiguo mejor conservado. El Panteón de Roma es una obra de construcción bastante singular.
Tiene un enorme pórtico y unos gruesos muros que resultan impresionantes. Pero, para poder apreciarlo en su justa medida, debe pasar dentro del enorme Panteón, que cuenta con una cúpula que se alza de manera vertiginosa sobre ti y te hace sentir minúsculo. A este efecto, súmale los haces de luces que se cuelan por una apertura circular en la cúspide de la cúpula, llamada “el óculo” y que ilumina las tumbas reales enclavadas en los muros circulares de mármol.
Los Museos Vaticanos
Es cierto que la ciudad de Roma tiene sobresalientes obras de arte, dignas de admiración, pero una de las más impresionantes son los frescos de Miguel Ángel en la Capilla Sixtina, que se muestran como una profusión caleidoscópica de colores e imágenes como broche final de los Museos Vaticanos, el cual se erige como el museo de arte más grande y popular de Roma.
Los pasillos de Los Museos Vaticanos están adornados con lienzos y tapices, puedes conseguir esculturas clásicas alrededor de sus enormes instalaciones. Estos hermosos pasillos conducen inexorables a las Estancias de Rafael.
Las Estancias de Rafael son cuatro salas con impresionantes frescos de Rafael y la Capilla Sixtina.
La Basílica de San Pedro
Aunque seas un “no creyente”, ésta iglesia que es la más grande e impresionante de Roma, te dejará con la boca abierta. Su grandiosa fachada y su interior majestuoso, están precedidos por una plaza memorable. Todo es muy opulento.
Una parte importante de la Basílica en la Cúpula de Miguel Ángel, la cual constituye una obra de arte arquitectónica renacentista que, fuera de todo molde, se convirtió en un perfil emblemático de Roma.
Aunque Roma es una ciudad llena de Iglesias, la Basílica de San Pedro destaca entre las demás, imponiendo un cierto respeto eclesiástico.
Via Appia Antica
Es una calzada romana antigua, la más famosa quizás. Atraviesa exquisitos pastos verdes y muchas ruinas grises de un lado a otro, es una muestra de belleza italiana ideal para pasar una mañana soleada. ¡Qué contraste con su pasado manchado de sangre! Si, fue en Via Appia donde llegaron a crucificar a Espartaco y seis mil de sus soldados esclavos.
También contiene las catacumbas donde los cristianos enterraban a sus muertos.
Museos capitolinos
En la antigüedad, el Campidoglio (también llamado “Colina Capitolina”) albergaba los dos templos más importantes de Roma. Hoy en día, el ascenso hacia la cima de esta colina es ideal para admirar las vistas y visitar los Museos Capitolinos en la Piazza del Campidoglio.
Contienen estatuas clásicas fascinantes, como por ejemplo, la famosa Lupa Capitolina (Luperca, la loba capitolina), la cual se ha convertido en un símbolo del arte etrusco temprano.
También se pueden apreciar algunos hermosos lienzos y un patio de entrada abundante en mampostería.
Es un lugar especial para tomarte fotos.
Trastévere
El barrio de postal de Trastévere queda al cruzar el río desde el centro histórico, sus callejones son de apariencia medieval, puedes conseguir plazas ocultas y palazzi (edificios que son mansiones) de tonos pastel.
En el camino puedes hallar gran cantidad de bares, cafeterías, trattorias y restaurantes llenos de clientes romanos y visitantes enamorados que se muestran en actitudes acarameladas.
Fontana de Trevi
Es la fuente más grande y famosa de Roma.
Diariamente, acude a esta fuente una gran cantidad de personas para echar allí sus monedas y asegurar que volverán a visitar la hermosa ciudad de Roma.
La Fontana de Trevi fue diseñada por Nicola Salvi en el siglo XVIII. Representa de forma artística un exceso rococó poblado de caballos salvajes, figuras míticas y rocas que forman cascadas. Recientemente fue restaurada y tras una larga espera, en el año 2015 se presentó nuevamente luciendo más espléndida que nunca.
Al atardecer, cuando es iluminada por el sol, es cuando luce más hermosa y cautivadora.
Foro romano y Palatino
El Palatino (o Monte Palatino) es una extensión verde de ruinas que traen recuerdos de donde todo empezó pues, en este lugar, según cuenta la historia, fue donde Rómulo mató a Remo y fundó la ciudad de Roma en el año 753 a.C.
Según se cuenta, en este lugar vivieron antiguos emperadores romanos entre lujos que ni siquiera podemos imaginar.
Sin duda, Roma es una ciudad esplendorosa, llena de arte y de historia reflejada en todos sus rincones.
