Es probable que en más de una ocasión hayas sentido ardor de estómago, una molestia en la parte superior del estómago, al rato de haber terminado de comer. Se trata de la acidez, un problema provocado por la salida del ácido que contiene el estómago hacia el esófago.
¿Quieres saber por qué se produce la acidez, cuáles son las causas, sus síntomas y qué hacer para evitarla? Trataré de resolver todas tus dudas.
¿Qué es la acidez?
Se denomina acidez a la molestia que ocasiona la salida del ácido que normalmente se encuentra en el estómago hacia el esófago, provocando la irritación de este último.
Se utiliza para describir diferentes síntomas asociados a la incomodidad tras la ingesta de alimentos. A menudo, es utilizado como sinónimo de indigestión, aunque cada vez se incide más en la diferencia entre ambos términos y se emplea para referirse específicamente al dolor o molestia abdominal alta. Aunque rara vez ponga en peligro la vida, la acidez frecuente o severa puede limitar las actividades de la vida diaria y la productividad y desencadenar complicaciones mayores.
Síntomas de la acidez
La acidez se caracteriza por sensación de quemazón o ardor que se localiza y produce en la boca del estómago, y que realmente está afectando al esófago. Este síntoma normalmente se presenta una hora después de ingerir los alimentos y puede persistir por varias más.
La sensación dolorosa se presenta en la garganta (esófago) justo detrás del esternón. Es frecuente padecer la sensación que la comida o líquidos regresan a la garganta o boca (regurgitación), especialmente cuando uno se agacha o acuesta. Además, estos síntomas pueden estar acompañados por un sabor amargo o ácido.
Causas de la acidez
La acidez es debida a un mal funcionamiento del esfínter inferior del esófago (cardias), el cual no se cierra bien o se abre más de lo debido, de forma que el ácido que se encuentra en el estómago puede pasar al esófago con facilidad, produciendo así la irritación del esófago y por tanto la sensación de acidez. Este padecimiento también puede ser debido a enfermedades del sistema nervioso central. La condición más común es que este síntoma se deba a la presencia de una hernia de hiato y se origina cuando el estómago se apoya parcialmente en la cavidad del pecho debido a una debilidad del diafragma.
Tratamiento de la acidez
A continuación te presentamos los mejores remedios caseros para la acidez que hemos recopilado.
- Aceite de Oliva para la Acidez
- Albahaca para la Acidez de Estómago
- Aloe Vera para la Acidez
- Bicarbonato de Sodio para la Acidez
- Chicle para la Acidez
- Dormir Elevando la Cabeza por la Acidez
- Infusión de Ulmaria para la Acidez
- Jengibre para la Acidez
- Manzana para la Acidez
- Manzanilla para la Acidez
- Miel para la Acidez
- No Acostarse Inmediatemente Después de Comer por la Acidez
- Pepino para la Acidez
- Regaliz para la Acidez
- Sandía para la Acidez
- Vinagre de Manzana para la Acidez
- Yogur para la Acidez
Nuestros remedios para la acidez pretenden ayudarte a estar informado, pero nunca deben sustituir una consulta médica. Es fundamental que consultes a tu médico sobre este o cualquier otro tratamiento natural, así como posibles contraindicaciones o incompatibilidades.
Alimentación / dieta de la acidez
Se recomiendan ingestas de poco volumen, repartidas en cinco o seis veces al día. Las temperaturas de los alimentos pueden influir ya que el excesivo frío o calor son irritantes de la mucosa gástrica, por lo que es recomendable comerlos templados.
Las verduras y frutas crudas deben ser peladas y sin semillas. La carne no debe estar demasiado cocida, y hay que evitar cocinarla a la parrilla ya que la costra tostada es irritante. Se prefieren las carnes hervidas, y las carnes blancas frente a las rojas.
Se desaconsejan los fritos en general, así como las comidas muy compuestas y condimentadas. Las grasas deben ser, en general, evitadas, así como los dulces en grandes cantidades, las fibras crudas, el salvado en exceso, los condimentos fuertes y la cafeína, ya que son altamente irritantes de la mucosa gástrica.
La leche se aconseja consumirla en cantidades reducidas y fraccionadas.
Evitar en la medida de lo posible el tabaco y el alcohol.