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Llevábamos 10 años esperando para disfrutar de un fenómeno así en España. El 20 de marzo se podrá ver un eclipse de Sol desde cualquier punto del territorio español. Será el primero de esta década, ya que desde el 3 de octubre de 2005 no se disfrutaba de un fenómeno así en nuestro país, cuando un eclipse anular cruzó la Península Ibérica dejando imágenes sorprendentes. Hubo otro en 1999, especialmente famoso por ser el último eclipse total del milenio.
Esta vez el eclipse será parcial. Esto significa que la Luna no tapará por completo el disco solar. En ningún momento nos quedaremos a oscuras. No será tan evidente, pero sí se puede ver de forma segura. Cómo, cuándo y dónde hacerlo son las cuestiones que se resuelven en esta guía.
¿Cuándo es exactamente el eclipse?
Se producirá el viernes 20 de marzo de 2015 y durará alrededor de dos horas. Podrá verse entre las 08:57 de la mañana y las 11:29 horas. Todo dependerá del lugar de España desde donde se observe. Así, por ejemplo, en Madrid comenzará a las 09:04 hasta las 11:18 horas y en Barcelona será desde las 09:11 y se prolongará hasta las 11:27. "En todo caso, el momento máximo del eclipse [cuando el Sol presente la mayor área de su superficie tapada por la Luna] será de uno o dos minutos", explica el astrónomo Mario Tafalla, del Observatorio Astronómico Nacional (OAN). En la web de este organismo, dentro del apartado Desde su municipio, podemos obtener información sobre el horario de inicio y fin en nuestra localidad, y también del momento máximo del eclipse. Sólo hay que poner el código postal para obtener toda la información del fenómeno. Esta tabla de la web Misión Eclipse también muestra al detalle el horario que tendrá el fenómeno en cada ciudad de España.
¿Se podrá ver igual en todos los puntos de España?
Partiendo de la base de que el horario de inicio y de fin no va a ser el mismo en Cádizque en Zaragoza, ya se podría decir que no se verá igual en todos los puntos de España. Será visible desde cualquier rincón del país (siempre que las condiciones atmosféricas lo permitan), pero no con el mismo grado de intensidad. De toda la Península Ibérica, A Coruña será la provincia donde mejor se vea (allí el oscurecimiento será del 76%), mientras que en Almería será del 57,5%. Lo mismo ocurre si pasamos a las islas. En el archipiélago canario será todavía menos intenso. En Santa Cruz de Tenerife el oscurecimiento será del 46,2% y en Las Palmas de Gran Canaria, del 45%.
¿Y en el resto de Europa, qué va a pasar?
En Europa se reproducirá el mismo esquema que en España: cuanto más al norte se esté, el grado de intensidad será mayor. De hecho, los habitantes de las islas Feroe y las Svalbard, al norte de Noruega, podrán disfrutar de un eclipse total. Mientras, en ciudades como Oslo el oscurecimiento será del 90% y en París, de algo más del 80%. Así, cuanto más nos dirijamos al sureste, se notará menos. En Atenas, será del 0,40%.
Y si salimos de Europa hacia África, el eclipse irá perdiendo intensidad paulatinamente hasta llegar a puntos como Monrovia, donde no se podrá apreciar. En este mapa, que el experto en visualización de eclipses Michael Zeil (www.greatamericaneclipse.com) ha cedido a El Huffington Post, se especifican los puntos de Europa y África donde mejor se verá el fenómeno.
Y en este otro, extraído del vídeo (en inglés) de Michael Zeil, se puede observar más detalladamente cómo afectará a España.
¿Quiénes se van a quedar sin verlo?
La respuesta a esta pregunta es fácil. Sólo hay que echar un vistazo al mapa de la pregunta anterior para descubrir que no se verá ni en América, ni en la Antártida, ni en Oceanía. Europa es el único continente desde el que podrá verse íntegramente, es decir, no habrá rincón que se quede sin disfrutar del fenómeno en mayor o menor medida. Mientras, en Asia y África también se podrá contemplar aunque sólo en contados territorios: los situados al norte del primero y al oeste del segundo.
¿Lo voy a notar si voy andando por la calle en España?
Pues no exactamente. No se oscurecerá todo como si fuese el fin del mundo, será algo progresivo. "Si fuera un eclipse total [como sí será en las islas Feroe y las Svalbard], desde luego que se notaría; pero en este caso será más gradual. Disminuirá luz respecto a la luminosidad de ese día, pero nada más", explica Tafalla. Algo así como si hubiese una nube pasajera y la calidad de la luz se tornase diferente.
¿Puedo mirarlo directamente?
Rotundamente no. "Mirar al Sol es peligroso siempre. El problema con los eclipses es que la gente tiende a hacer cosas que no debería", explica Mario Tafalla. "Nunca se debe observar el Sol directamente, ni a simple vista ni con gafas de sol", recalca el astrónomo.
Tampoco se deben usar cámaras de fotos o vídeo para verlo a través de ellas, ni prismáticos o telescopios que no tengan filtros adecuados, ya que éstos, al amplificar la imagen, pueden provocar lesiones oculares más graves y en menos tiempo.
¿Qué pasaría si lo hago?
Mirar al Sol sin protección puede ocasionar importantes lesiones irreversibles en la córnea y quemaduras en la retina. Según alerta el Planetario de Madrid, la luz directa del Sol produce un punto ciego en el lugar del daño e incluso puede provocar ceguera permanente. "Durante un eclipse parcial el Sol nunca está totalmente cubierto por la Luna y por lo tanto mirarlo sin una protección segura y adecuada puede dañar los ojos, al igual que sucedería en un día cualquiera cuando no hay eclipse", recuerda el Observatorio Astronómico Nacional.
¿Cómo puedo verlo?
Para garantizar una observación segura hay dos opciones: utilizar unas gafas de eclipse o un telescopio equipado con filtros de cristal óptico, de polímero negro metalizado o de tipo Mylar. Las gafas de eclipse son unas gafas especiales homologadas con una montura de cartón y unos filtros (según la normativa europea, de tereftalato de polietileno, y con una índice de opacidad 5 o mayor) que eliminan las radiaciones solares dañinas.
En lugares como el Planetario de Madrid se van a organizar observaciones en las que se van a repartir estas gafas a los asistentes y que contarán con telescopios equipados con los filtros adecuados.
¿Si no tengo gafas o filtros, hay algún otro método para verlo?
Se puede observar de manera indirecta, viendo la imagen proyectada sobre algún tipo de superficie lisa. Estos métodos se basan en el efecto Pinhole (ojo de aguja), un principio por el cual la luz que atraviesa un pequeño orificio proyecta la imagen en un plano posterior, como en una cámara oscura. Por ejemplo, se puede utilizar una cartulina que haga sombra sobre el suelo y abrir pequeño agujero para ver cómo varía el punto de luz sobre el pavimento.
Lo recomendable es que el agujero sea muy pequeño y el lugar donde se proyecte la imagen esté a cierta distancia. También se puede utilizar una espumadera, una galleta con agujeritos o un rallador.
Una última opción es verlo a través de internet. En la web Misión Eclipse se podrá seguir una retransmisión del eclipse total de las Islas Feroe.
¿Dónde consigo las gafas o los filtros? ¿Y cómo tengo que pedirlos?
El material del que están hechos es el tereftalato de polietileno. En Estados Unidos y Reino Unido se comercializa bajo los nombres Mylar y Melinex, por lo que es habitual encontrarlos con esta referencia en las tiendas.
Si lo que se busca son unas gafas de eclipse ya hechas, hay algunas ópticas que las comercializan por 3 euros o también se pueden adquirir en algunas páginas web. Otra opción es comprar el material y hacer filtros Mylar caseros siguiendo estas instrucciones.
¿Valen las radiografías viejas o CDs?
No. En ningún caso hay que mirar al Sol, haya eclipse o no, a través de radiografías, CDs o DVDs, negativos velados, papel de aluminio, cristales ahumados, gafas de soldador, gafas oscuras... Ninguno de estos métodos filtra las radiaciones solares dañinas, o lo hacen en un factor muy bajo.
¿Cómo se usan las gafas de eclipse?
Como unas gafas normales; con ellas puestas la retina no sufrirá daños si se mira directamente al Sol. El Planetario de Madrid recomienda descansar la vista unos 30 ó 40 segundos por cada minuto de observación. "No ande mientras las use, preferiblemente permanezca sentado", aconseja por su parte el OAN. "No deben ser usadas con aparatos ópticos, aunque sí pueden superponerse a las gafas graduadas de uso habitual", apunta este organismo.
Si me lo pierdo, ¿cuándo volverá a repetirse un fenómeno así?
No va a ser pronto, los eclipses de Sol no suceden todos los años. De hecho, para el próximo habrá que esperar hasta el 12 de agosto de 2026. Eso sí, será un eclipse total y resultará mucho más espectacular.
Lo que sí habrá son eclipses de Luna. Este mismo año se podrá disfrutar de uno: ocurrirá el próximo 28 de septiembre y será observable durante las últimas horas de la noche. Podrá contemplarse desde cualquier punto de España, con la única condición de que la Luna esté sobre el horizonte, y se verá más o menos así.