Son muchos los que ven en la reina Sofía el verdadero valor monárquico de Zarzuela. Y más ahora, que la Familia Real tiene varios frentes abiertos que amenazan con debilitar los pilares de la Institución. De hecho, doña Sofía es el único miembro Real con actos oficiales estos días. Ella se ha hecho cargo del trabajo de representación institucional de la Casa, mientras su marido continúa centrado en el tedioso proceso de recuperación de su último paso por quirófano, los príncipes de Asturias aprovechan sus últimos días de asueto y su hija Cristina prepara su inminente traslado a tierras suizas.
Este martes 27 de agosto, a las 11:00 horas, la reina visita el banco de alimentos de Mallorca. Ella también está oficialmente de vacaciones, pero eso no le impide tener agenda. Como aseguró en el libro ‘La reina muy de cerca’ de Pilar Urbano, “nosotros  no somos reyes de ocho a tres”. Y así es, doña Sofía lleva todo este mes alternando su papel como abuela en Marivent y el de reina con diversos actos de representación que se escapaban de la agenda oficial. Cumpliendo con creces con sus labores de soberana sin horario laboral.
Es por ello que las encuestas indican que la cónyuge real es la única en mantener su nivel de popularidad entre los españoles, mientras que el resto de la familia pierde aceptación por momentos. Estas encuestas encierran el descontento de los ciudadanos, quienes a raíz de los últimos escándalos no aceptan que los Borbón se adhieran a los privilegios reales a la vez que reclaman sus derechos como españolito de a pie.
Pero esta profesionalidad de la Reina no es sólo durante los meses de verano. También ejerce activamente en las fundaciones que preside, cosa que no hacen ni los Príncipes ni las Infantas, que acuden a los actos correspondientes a ofrecer su apoyo de cara a los medios de comunicación. Doña Sofía está al tanto de los proyectos que se llevan a cabo en sus organizaciones y de quién es quién en el organigrama. Suele facilitar la labor de los reporteros y periodistas que cubren sus actos y nadie de su seguridad se ha sobrepasado con la prensa, como si lo han hecho, en ocasiones, los escoltas de sus hijos.
Distinta forma de hacer las cosas que, como es lógico, no son igual valoradas por los españoles, quienes están cada vez más descontentos con los ‘escándalos’ del resto de miembros. Que si el ‘caso Noos’, que si las salidas de tono de Letizia y los posibles problemas matrimoniales de los Príncipes, que si los escarceos amorosos del Rey y el divorcio de de la infanta Elena tras su “cese temporal de la convivencia”. Por el momento, la Reina sale airosa de todos estos escándalos.